Victoria Ibáñez
Siguiendo las pistas del éxito
Foto: Mauro Tovar.
Exalumna del colegio Marymount, la fundadora y directora ejecutiva de la Cámara de Comercio Colombo Americana, AmCham Atlántico y Magdalena, es una líder hecha a sí misma, que desde los 18 años, cuando ingresó al mercado laboral, se consagró con disciplina y transparencia a aprender haciendo, forjándose una carrera de éxito.
La posición exitosa y altamente influyente que, desde hace largos años, ocupa Victoria Ibáñez en Barranquilla y en la Región Caribe no es en absoluto el resultado del azar. Todo lo contrario: ella se trazó el camino para llegar a esa meta de un modo consciente y calculado, y lo recorrió siguiendo un plan rigurosamente metódico.
En efecto, en la segunda mitad de la década de 1980, descubrió su extraordinaria capacidad comercial –hecha a su vez de otras dos capacidades, la de persuasión y la de convocatoria– a través de un emprendimiento muy personal e informal: un mercado de pulgas que abrió en el barrio El Prado. Luego de ese ensayo arrolladoramente triunfante, se dijo a sí misma: “Voy a acumular ahora una experiencia gerencial de unos seis años que me permita llegar a mi cargo soñado”.
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