El próximo jueves 1 de julio el príncipe William y su hermano Harry tendrán que hacer a un lado sus diferencias para asistir a la célebre develación de una estatua en honor a su difunta madre, la princesa Diana de Gales. Dicho evento se realizará con el propósito de homenajear su cumpleaños número 60, el cual se celebra el mismo día.
“Es el momento adecuado para reconocer su impacto positivo con una estatua permanente”, dijeron los príncipes en 2017, año en el que encargaron la realización de la obra. “Nuestra madre tocó tantas vidas. Esperamos que la estatua ayude a todos los que visitan el Palacio de Kensington a reflexionar sobre su vida y su legado”.
La obra es del escultor Ian Rank-Broadley, un artista ya conocido gracias a su diseño de la reina Isabel II para las monedas británicas. El lugar elegido para ser instalada fue el Sunken Garden en el Palacio de Kensington, donde Diana vivía y pasaba largas horas con los jardineros, y que ahora es el hogar del príncipe William y su familia.
La inauguración de la estatua el jueves será un evento pequeño con los príncipes, familiares cercanos de Diana y el escultor Rank-Broadley entre los pocos asistentes.
La princesa Diana falleció a los 36 años de edad en un accidente automovilístico ocurrido en París en el año 1997, en ese momento William tenía 15 años y Harry 12. Desafortunadamente la relación de hermanos se han distanciado bastante durante los últimos años, específicamente tras la boda de Harry en el 2018 con la actriz Meghan Markle.
Incluso el biógrafo Robert Lacey dijo que los hermanos se pelearon inmediatamente después del funeral del príncipe Felipe en abril de este año y no hay señales de mejora.
«No parece probable que el conflicto entre los dos hijos amargamente divididos de Diana vaya a terminar pronto”, escribió en el medio británico Daily Mail. Incluso agregó que amigos y familiares de William y Harry han tratado de lograr una reconciliación.
«A menos que uno de ellos vaya a pedir disculpas, y creo que probablemente deba ser Harry, no puedo ver que esta relación mejore en este momento”, dijo al citado medio la analista de la realeza Penny Junor. «Tengo entendido que los muchachos no están hablándose, ciertamente no de la manera en que los hermanos hablan normalmente”, agregó.
La estatua conmemorativa fue encargada hace cuatro años por los principales, mucho antes de que la familia real británica se enfrentara a los últimos grandes desacuerdos y escándalos públicos.
Con su propósito de celebrar la vida de la princesa Diana, en un evento que marcará un reencuentro entre los hermanos, podría significar una oportunidad de acercamiento.
Por el momento, y siguiendo el plan, el príncipe Harry ya se encuentra en Reino Unido para estar presente en la ceremonia y, de acuerdo con el comentarista real Richard Palmer, el hijo menor de Lady Di permanece hospedado en Frogmore Cottage (Palacio de Windsor), donde residirá hasta su regreso a Estados Unidos.
También, como se había anunciado, su esposa, la actriz Meghan Markle, permanece en California, Estados Unidos, junto a sus hijos Archie y Lilibet Diana.
Medio británicos han indicado en los últimos días que Kate Middleton, esposa del príncipe William, podría no asistir a la inauguración de la estatua de Princesa Diana después de que la reunión se redujo, debido a la cuarentena por el coronavirus.
También especulan que la reina Elizabeth II no estaría en el evento a celebrarse en el Sunken Garden, ya que se encontraría en Escocia.
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