Bryan Randall, novio de Sandra Bullock desde 2015, falleció el pasado sábado 5 de agosto a los 57 años de edad después de tres años sufriendo esclerosis lateral amiotrófica (ELA), una enfermedad que llevó en el más absoluto secreto.
“Con enorme tristeza compartimos que el 5 de agosto Bryan Randall falleció en paz tras una batalla de tres años contra la esclerosis lateral amiotrófica. Bryan decidió mantener su vida con la ELA en la intimidad, y todos los que le cuidamos hicimos todo lo posible por cumplir con su petición”, expresó la familia a través de una nota difundida por la revista People.
“Estamos inmensamente agradecidos a los incansables médicos que vivieron su enfermedad junto a nosotros, y a las increíbles enfermeras que se convirtieron en nuestras compañeras de habitación, a veces sacrificando a sus propias familias para estar con nosotros. En este momento pedimos privacidad para llevar nuestro duelo y para aceptar lo imposible que es decirle adiós a Bryan”, agregan.
Randall, un exmodelo que cambió de lado y se hizo fotógrafo, conoció a Sandra Bullock en enero de 2015 durante una sesión de fotos por el cumpleaños de Louis, el hijo que la actriz adoptó a principios de 2010. Bryan y Sandra acudieron juntos a varios estrenos y también se dejaron ver en la boda de Jennifer Aniston y Justin Theroux en agosto de hace ya ocho años, una época en la que Bullock preparaba la adopción de su hija Laila.
“Es súper amable. Para los niños él es el número uno y yo la número dos, y lo entiendo porque es más divertido que yo y les da siempre los mejores premios”, explicaba la actriz sobre su novio en una entrevista para InStyle. “Está involucrado con su trabajo escolar, va a todas las fiestas de cumpleaños de los niños y siempre está al lado de Sandy con lo que sea que ella necesite. Han construido una gran vida juntos y los niños son la pieza central”, agregaban desde su entorno.
Bullock, ganadora de un Oscar y una de las actrices más reconocidas de Hollywood, describió a Randall como “el amor de su vida” en más de una ocasión, pero nunca se plantearon casarse. “Soy alguien que pasó por el proceso de divorcio. Encontré el amor de mi vida. Compartimos dos hermosos hijos, tres, porque él tiene a su hija mayor. Es lo mejor que hay. No quiero decirle a las personas que lo hagan como yo lo hago, pero no necesito un papel (en referencia a estar casada) para poder ser una pareja y madre devota”.
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