La vicepresidenta de los Estados Unidos, Kamala Harris, y la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, hicieron historia durante el discurso del presidente Joe Biden en una sesión conjunta del Congreso durante su discurso a 100 días de iniciar su gobierno, lo que marca la primera vez que dos mujeres estarían sentadas detrás del presidente ocupando los dos cargos más importantes después del mandatario.
Harris ingresó a la cámara de la Cámara de Representantes y recibió un aplauso por parte de los asistentes. Una vez que llegó al podio, Harris y Pelosi se saludaron juntando sus codos.
En sus comentarios de apertura, Biden rindió homenaje a la naturaleza histórica de su vicepresidenta, la primera mujer en desempeñar ese cargo en la historia de Estados Unidos: «Gracias a todos, señora presidenta (de la Cámara), señora vicepresidenta», dijo el presidente. «Desde este podio, ningún presidente ha dicho esas palabras, y ya es hora».
Harris, quien también es la primera persona negra y la primera persona del sur de Asia en ocupar el cargo, permaneció sentada a la derecha del presidente mientras pronunciaba su discurso. Y Pelosi, quien se convirtió en la primera mujer en su cargo en 2007, se sentó a la izquierda del presidente.
Cuando se le preguntó sobre el significado del hito de dos mujeres sentadas detrás del mandatario para el discurso, Harris respondió con franqueza «normal» a los reporteros en el Capitolio. Las palabras de Pelosi fueron «ya era hora».
El jefe de gabinete de la Casa Blanca, Ron Klain, destacó la naturaleza histórica de los asientos del estrado cuando hizo una vista previa del discurso la semana pasada.
«Por primera vez en la historia de Estados Unidos, detrás del presidente cuando habla, habrá dos mujeres: una vicepresidenta y una presidenta de la Cámara. Los presidentes se han dirigido al Congreso desde que lo hizo George Washington», dijo Klain durante una conversación, y agregó: «No fue, hasta hace 14 años, la primera vez que uno de esos asientos fue ocupado por una mujer. Así que tomó mucho tiempo llegar a ese hito. Catorce años después, por primera vez, habrá dos mujeres detrás del presidente».
El asiento simbólico también connota la primera vez que las mujeres ocupan el primer y segundo lugar en la línea de sucesión presidencial, un signo de las mujeres en el poder en sus respectivos roles.
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