Por María Paola Mejía
En el afán del día a día nos estábamos perdiendo de un momento tan importante como es sentarnos a la mesa, con el valor que ésta se merece.
No solo por el ritmo de vida, sino porque también hemos perdido los buenos modales y nos produce temor el que nos mencionen términos como ‘etiqueta’ y ‘protocolo’ cuando, por el contrario, son estos los que nos facilitan las relaciones tanto en el ámbito familiar, social y empresarial.
Estas razones conllevan a que se produzca en nosotros cierta pereza de poner una mesa bonita en nuestro diario vivir; habíamos dejado esto reservado solo para ocasiones especiales. La vajilla bonita la sacábamos de vez en cuando; los cubiertos heredados de los abuelos los brillábamos ocasionalmente para, de pronto, un día sacarlos; lo mismo con las copas y qué decir de los manteles que se ponían amarillos de tenerlos tanto tiempo guardados.
En esta pandemia la vida nos sacudió y nos hizo entender que todo puede cambiar en un momento y que hay que vivir el aquí y el ahora. Así que, en estos tiempos, poner la mesa bonita volvió a ser importante, estemos solos en casa o en familia; volvieron los manteles, los servilleteros, las servilletas en tela; las vajillas se lucen, los cubiertos brillan.
Actualmente hay una gran oferta en el mercado y se abrió un nicho muy importante para pequeños emprendedores trabajando desde casa, los cuales nos ofrecen un sinfín de opciones en menaje y adornos para decorar ese espacio tan especial para nosotros.
Tenemos el deseo de poner una mesa linda y arreglada, y todos los elementos necesarios, pero entonces nos embarga el miedo por no saber cómo hacerlo. Solo te puedo decir que dejes volar tu imaginación, tienes todo en tu casa para vestir una mesa.
Lo primero que debes tener claro es cuál será el menú, para que la creatividad se empiece a despertar en ti y comiences a distinguir tus opciones. Después, escoge una paleta de colores, ya sea en el mantel o los adornos.
Para mí siempre es muy importante contar con un elemento natural: flores, hojas del jardín, frutas que se ven bien lindas como centro de mesa. Si vas a usar el elemento fuego con objetos como velas, que sean en la noche; es el único momento en que se encienden, en el día no.
Si tienes una sola vajilla blanca no importa, créeme que puedes hacer un lindo arreglo con ella; si tienes varias, pues mucho mejor. Si sabes bordar o hacer crochet, hazlo, que también están de moda.
Es importante que recuerdes las normas básicas: a la izquierda, los sólidos, y, a la derecha, los líquidos. Así:
Poco a poco vamos aprendiendo. No tengas miedo, la etiqueta y protocolo hoy en día son más flexibles, pero ¡no han pasado de moda!
Bienvenido a este arte, ¡seamos juntos anfitriones e invitados!
Duville, el lugar donde mereces vivir