Con un disfraz sensual puedes llevar a tu pareja a vivir experiencias y sensaciones inimaginables, pueden trasladarse a otra época, a otro momento y volverse tan malos como deseen volverse. El disfraz sirve como un intercambio de roles, y así puedes ser una chica muy dulce o una chica muy traviesa.
Si ya estás decidida a un disfraz sexy para tu chico porque ya sabes lo bueno que puede ser para tu relación y no sabes qué usar, te damos algunos ejemplos de los disfraces que más le gustan a los hombres y puedas ser la reina no sólo de su corazón sino de su cama.
Para dejar que tu hombre de las órdenes, puedes optar por el disfraz de enfermera sexy, ya que puedes ir preguntándole qué quiere que le “revises”. Otro buen ejemplo es el de la tierna y sexy colegiala, donde puedes comenzar haciéndole ver que él será el maestro y tú quieres aprender todo lo que él sabe en la cama y ,por qué no, fuera de ella.
Otros disfraces sexies en los que pueden crear roles de sumisión son los de secretaria, mucama, oficinista, aeromoza y monja entre, otros más de fantasía como el de Caperucita roja.
Para que tomes el control de la situación, para esos hombres a los que les encanta que la chica tome la iniciativa de vez en cuando (algo muy recomendado) y dicte las reglas del juego, los disfraces sexies más acertados serían, primero, el de la policía sexy, un clásico que jamás dejará de encantar.
En estos no es necesario que crees toda la trama y el rol de un personaje especifico, ya que pueden ser solo él y tú pero en una situación muy sensual. Puedes usar un disfraz de gatita, usar un disfraz con cuero negro, vaquera, futbolista o tal vez tenista, conejita Playboy o incluso de gitana.
En esta categoría entran todos los disfraces, incluso los más sencillos que puedes crear con un simple pero inspirado maquillaje pin up. Busca en tu armario prendas de cuero, blusas blancas y amárralas hasta tu cintura, usa sombreros y corbata, juega con los accesorios, prueba usar medias con diseños y colores variados.
No limites tu imaginación y anímate a probar disfraces sexies para una noche especial, para celebrar un aniversario o para simplemente celebrar una noche de halloween.