Lo que está pasando en redes
Publicado 12 diciembre, 2024
Carmen Villalobos vive una de las pérdidas más dolorosas para ella.
Por medio de sus redes comentó lo duro que ha sido para ella y más para estas fechas.
Carmen Villalobos, reconocida por su participación en producciones como Sin senos no hay paraíso, entre otras producciones compartió recientemente un difícil momento personal. La actriz reveló que enfrentó la pérdida de María, una perrita rescatada que estaba bajo su cuidado y con quien había formado un lazo especial.
En el vídeo se comparte una publicidad donde participó Villalobos junto con sus perros.
A través de sus redes sociales, la también presentadora de Top Chef VIP explicó que María falleció debido a complicaciones de salud. Este desenlace le dejó un profundo pesar, ya que tenía la intención de adoptarla de manera definitiva, pero no alcanzó a concretar ese deseo.
La actriz, por medio de sus redes, siempre comparte campañas o páginas para poder ayudar a los animales y adoptar.
Desde sus plataformas sociales, la actriz barranquillera expresó el profundo impacto emocional que le generó perder a este ser tan especial con el que había creado un vínculo entrañable. En su mensaje, también hizo un llamado a la acción para sus seguidores, incentivándolos a involucrarse en la causa de apoyar a los animales en situación de abandono.
Foto: Carmen Villalobos compartiendo campañas de ayuda para animales en sus historias.
“Las donaciones no tienen que ser grandes, pero sí pueden marcar una diferencia enorme para estos seres maravillosos que esperan una oportunidad en las fundaciones”, subrayó, alentando a su comunidad a contribuir en la mejora de las condiciones de vida de los animales necesitados.
Foto: por medio de sus historias comparte la triste noticia.
Por el momento Villalobos no ha confirmado si planea adoptar o apadrinar nuevos perros. Mientras tanto, encuentra consuelo y alegría en la compañía de sus dos fieles mascotas, Freud y Mambo. Estos pequeños yorkshire terrier son su mayor fuente de energía, especialmente cuando regresa agotada a casa, llenándola de cariño y vitalidad.
