Una imagen fugaz, pero no por ello menos relevante. Por primera vez, los cuatro hijos de Alberto de Mónaco han aparecido juntos en una fotografía que ha sido compartida por la mayor de estos, Jazmin Grace Grimaldi, en su cuenta de Intagram.
La instantánea en cuestión forma parte de un carrusel visual con los momentos más importantes de su 2021 y entre recuerdos de viajes y sucesos importantes, se puede ver el momento en el que Jazmin —hija del soberano de Mónaco y la estadounidense Tamara Rotolo— sonríe junto a sus tres hermanos mientras posan sentados en un banco.
En la fotografía compartida por Jazmin, de 29 años, los pequeños Jacques y Gabriella, de 7, se sientan a la derecha de su hermana, mientras que Alexandre Grimaldi Coste —de 18 años e hijo de Alberto de Mónaco con la azafata Nicole Coste—, se sitúa a la izquierda.
Antes de que Alberto de Mónaco contrajera matrimonio con la nadadora zimbabuense Charlene Wittstock en 2011, ahora Charlene de Mónaco, el soberano ya tenía dos hijos de dos relaciones anteriores y cuya paternidad reconoció años después de su nacimiento.
Jazmin Grace Grimaldi es fruto de la breve historia de amor que el príncipe tuvo con la en aquel entonces camarera estadounidense Tamara Rotolo, a quien conoció durante unas vacaciones en el sur de Francia en 1991. Jazmin nació en marzo de 1992, aunque Alberto no reconoció su paternidad públicamente hasta 2006. En la actualidad, tal y como además se puede ver en sus redes sociales, la primogénita reside junto a su madre en Estados Unidos.
La historia se repitió más tarde. El 24 de agosto de 2003 nació Alexandre Coste, hijo de Alberto de Mónaco con la azafata togolesa Nicole Coste, con quien mantuvo también una breve relación y cuya paternidad reconoció en 2005 cuando Coste dio a conocer la existencia del niño.
Alexandre, quien vive alejado de los focos, guarda una excelente relación con su hermana mayor, Jazmin.
De entre los hijos de Alberto de Mónaco, por su condición de príncipes —y en el caso de Jacques, de heredero— son los mellizos de siete años quienes centran todas las miradas, más aún ahora que desde hace meses viven alejados de su madre, Charlene, quien aún se recupera de las secuelas de una infección de oídos, nariz y boca.
La última vez que se les pudo ver junto a ella fue en el regreso de la princesa al Principado, el pasado mes de noviembre. Un reencuentro que parecía poner fin a meses de separación, pero que apenas unas horas más tarde se confirmaba efímero, puesto que Charlene volvía a apartarse de Mónaco para cuidar de su salud. Desde entonces, los pequeños solo han aparecido en público en compañía de su padre y de su tía Carolina de Mónaco.
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