El anuncio por medios de prensa este sábado de la elección del demócrata Joe Biden como presidente número 46 de Estados Unidos trajo otra revelación, por primera vez una mujer, afronorteamericana y de origen asiático es electa vicepresidenta de esa nación.
Nacida en octubre de 1964 en Oakland, California, Kamala Harris se graduó en la conocida Universidad Howard, en Washington. Fue la primera mujer fiscal del distrito de San Francisco y la primera mujer que no es blanca en ser elegida fiscal general de California (fue electa en 2010 y reelecta cuatro años después).
Se convirtió en la segunda mujer afroamericana y la primera surasiática americana en ser electa al Senado (2016), donde impulsó reformas al sistema de salud, la prohibición de las armas de asalto y una reforma fiscal progresiva.
También se destacó por sus preguntas incisivas a representantes de la administración Trump durante las audiencias en el Legislativo.
Su madre y su padre nacieron en la India y Jamaica, respectivamente. En diferentes entrevistas, Harris ha reconocido el papel que desempeñó su madre en su educación para defender sus raíces familiares.
Hasta diciembre de 2019, cuando renunció a la nominación del Partido Demócrata a los comicios, fue oponente de Biden e incluso le lanzó ataques calificados de duros, pero este la seleccionó como compañera de fórmula en agosto pasado.
Muchos demócratas ven a Harris como un reflejo de lo que consideran ocurre con el partido: una formación política apoyada por mujeres y, especialmente, por mujeres negras.
De acuerdo con analistas, su figura apela también a personas progresistas y votantes negros. Su selección fue acogida con entusiasmo, pues ayudó a unificar la coalición demócrata por encima de las líneas raciales y generacionales, valoró el estratega demócrata Joel Payne, que integró el equipo de campaña de Hillary Clinton en 2016.
En numerosas oportunidades cuestionó a individuos nominados por Trump para cargos diversos que podrían desafiar el derecho al aborto, lo cual se ha interpretado como un acto de defensa a los derechos de las mujeres estadounidenses.
Se considera que su experiencia en justicia penal podría ayudar a la Administración de Biden a abordar cuestiones de igualdad racial y sobre la policía, asuntos que este año adquirieron mayor relieve tras el asesinato de varios afronorteamericanos a manos de agentes y las gigantescas protestas que provocaron.
En el debate entre los aspirantes a la Vicepresidencia de Estados Unidos, celebrado a inicios de octubre, Harris abrazó el compromiso demócrata de garantizar gratuitamente a todos los sectores sociales la vacuna contra la Covid-19.
En aquella oportunidad, al analizar el desempeño de la economía, enfatizó que la política económica de la administración Trump beneficia a los millonarios y mide la solidez económica de EE.UU. a partir del beneficio que tengan los ricos.
También criticó el modo en el que Trump se alejó de todos los tratados ambientales y varios acuerdos internacionales, lo cual consideró que pone en peligro la seguridad de ese país, y eliminó de su proyección diaria las palabras Ciencia y Medioambiente.
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