Después de una temporada en el Real Madrid plagada de éxitos en las que tuvo poca o nula influencia, James Rodríguez se había mostrado decidido a partir de la casa blanca para encontrar un nuevo club donde pudiera acumular minutos y protagonismo, con el mundial Rusia 2018 en mente. La llegada del juvenil español Ceballos al club de Concha Espina ponía mayor presión al colombiano, y por lo pronto, su salida tiene final feliz, pues aterrizará en otro gigante europeo: el Bayern de Múnich.
PSG, Milan y Manchester United fueron algunos de los pretendientes con los cuales emparejaron al crack cucuteño en los últimos meses, pero su destino está lejos de las ligas francesa, italiana e inglesa, y lo que espera a James es el anhelado reencuentro con el estratega que lo hizo brillar en el Madrid: el italiano Carlo Ancelotti, actual director técnico del Bayern Munich, vigente campeón de la Bundesliga.
Antes de que el Madrid empezara su gira por Estados Unidos, el representante de James, el portugués Jorge Mendes, dedicó toda su energía a conseguirle club al 10 de la selección Colombia, y así se marcó el fin de la trayectoria de James por Madrid. Un fin, que, en todo caso, permanece relativamente en suspenso, pues el Bayern adquiere los servicios del volante en calidad de préstamo: cinco millones de euros por dos temporadas, y una opción de compra de 35,2 millones es el total de la operación que lleva a James a ser dirigido por Carlo Ancelotti una vez más. Además, James percibirá un salario de 8 millones de euros brutos, los cuales abonará el club bávaro.
Con Ancelotti en el banco, James mostró su mejor juego en el Bernabéu, logrando una temporada debut de lujo, con 17 goles y 18 asistencias en 46 partidos oficiales, por lo cual no es extraño que el director general del Bayern Munich, Rummenigge, haya comentado que James fue el deseo de Ancelotti en este mercado de pases. Así, el sueño se cumple a ambas partes, y James espera responder con toda su calidad en esta nueva aventura europea.